El occidente del municipio de Neiva comprende los corregimientos de San Luis, Chapinero y Aipecito. Esta región limita al oeste con el municipio de Planadas (Tolima), al norte con el municipio de Aipe (Huila) y al sur con el municipio de Palermo (Huila). A diferencia del casco urbano del municipio, ubicado en las orillas del río Magdalena, estos tres corregimientos se encuentran en las estribaciones de la cordillera central. La cadena montañosa que caracteriza la zona le brinda un relieve quebrado y complica la construcción y mantenimiento de la infraestructura vial. La extensión de superficie de cada uno de estos corregimientos es de 6649 ha. (Aipecito), 10616 ha. (Chapinero) y 24094 ha. (San Luis), lo que suma 41359 ha., alrededor del 34% del total de la zona rural del municipio de Neiva. En estos corregimientos se ubican 28 veredas.
En su ubicación como zona intermedia entre los departamentos del Tolima y del Huila, se ha consolidado una economía basada principalmente en el cultivo y comercialización del café. También aparecen otros cultivos como maíz, fríjol, caña panelera, yuca, y en menor medida, ganadería. En esta región también hay algunas explotaciones mineras, relacionadas con materiales de cantera (caliza, mármol, gravilla). Por otro lado, se destaca la importancia estratégica de la región como punto estratégico a nivel ambiental, de la que se surte de agua a varios centros poblados y a municipios vecinos del noroccidente de Huila (Palermo, Santa María, Aipe). La región fue escenario de la consolidación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la década de los años 1980 y 1990, dada su cercanía con el vecino municipio de Planadas. Ahora, con la implementación de los acuerdos de la Habana, a partir del 2016, diversas organizaciones de productores de café que trabajan activamente en estos corregimientos desean posicionar el grano a nivel regional, a través de puntos de venta y articulación con comerciantes y consumidores.