Desde los primeros bocetos biográficos de fray Cristóbal de Torres, consta la referencia a su devoción al Santísimo Rosario y a su acción en favor del establecimiento de su práctica[1]. En consecuencia, el Colegio que fundó en Santafé habrá de quedar bajo la protección de Nuestra Señora del Rosario. Fin del primer capítulo de historia rosarista.
Andando los siglos, en la conmemoración del tercer centenario del Colegio, el general Gustavo Rojas Pinilla condecoró a La Bordadita con la Gran Cruz Extraordinaria de Boyacá, conforme al Decreto 3349 de 22 de diciembre de 1953
[2]. Fin del segundo capítulo de historia rosarista.
El Dr. Núñez Conto ocupó la rectoría del Rosario en el periodo 1852-58.
Ahora es tiempo de volver sobre la leyenda de La Bordadita, más reciente pero más adherida al recuerdo emotivo de los rosaristas. Quiere la leyenda que
Margarita de Austria, esposa de Felipe III, labró la imagen de la Virgen para regalársela a fray Cristóbal, confesor de las dos majestades. La leyenda, de rigurosa autoría anónima, ya circulaba en tiempos del rector
Juan Nepomuceno Núñez Conto (mediados del siglo XIX) y vino a recibir respaldo artístico cuando uno de sus sucesores, el Dr. Rafael María Carrasquilla, ordenó que el artista Enrique Recio y Gil ejecutara el retrato de la reina, probablemente en España, guiándose por retratos de corte, como el de Velázquez.
A la leyenda nada le ha importado que un estudioso como fray Alberto Ariza
[3] haya reparado en el grave anacronismo que implica (la reina murió en 1611) ni que en el Archivo General de la Nación existan documentos que indican que La Bordadita puede ser artesanía muy americana, pues en un papel de 1665 consta la existencia de “un lienzo pintado y bordado de la hechura de Nuestra Señora del Rosario, con bordadura de oro y seda con algunas piedras, que dijo el dicho padre presentado que, aunque no es de la fundación del dicho Colegio, lo dio a él”, hallazgo de Guillermo Hernández de Alba, que luego conoció
María Clara Guillén, directora que fue del Archivo: la historia y la leyenda no se pisan las mangueras.
[1] “Fue de entrañas afectissimo a la devocion del Santissimo Rosario, y su singularissimo Promotor”, según refiere
fray Gonzalo Arriaga en su
Historia del insigne Convento de San Pablo, Orden de Predicadores de la ciudad de Burgos [s.f.].
[3] Fray Cristóbal de Torres, O.P. Arzobispo de Santafé de Bogotá, Fundador del Colegio Mayor del Rosario. 1573–1654. Homenaje de la Academia Colombiana de Historia en el Cuarto Centenario de su nacimiento: 1573 - 27 de diciembre 1973. Bogotá: Kelly, 1974.