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Estudio y trabajo en el Colegio del Rosario: el caso de Joaquín Salgar

portada

Hoy les presentamos un documento similar al de Cosme Gómez Maz, portero y sacristán del Colegio del Rosario. El "contrato" que suscribe Joaquín Salgar también significa funciones de portero, pero de un lugar especial por su contenido de obras de arte, invaluables para la Institución. Veamos pues el documento:

 

 

[Caja 91 f.245r] Conste por el presente documento que yo el infrascrip-

to pensionista Joaquin Salgar; he recibido del Sōr

Rector actual una colocacion en el Colejio que tiene anexa

la obligacion de cuidar con mucho esmero de la llave

limpiesa i seguridad de la sala destinada á los actos

literarios privados en donde se encuentran hoi todos los

retratos de los S.s rectores i demas hombres benemeri-

tos del Colejio perfectamente limpios i remendados por

un pintor todos los que estaban rotos i tres faroles nue-

vos i enteramente sanos, bajo las siguientes condiciones:

1.a abrir esta piesa para las nochinas i sabatinas gu-

ardando las llaves entre tanto, i concluidos los actos lite-

rarios serrarla i entregarlas al Sōr Vicerrector; 2.o cui-

dar mientras duran los actos que no bayan á romper

algun farol lastimar algun cuadro ó los asientos. Si

resultase algun daño en los retratos ó cualq.a otro ob-

jeto de la piesa; quede solemnemente comprometido

á repararlo á mi costa sin alegar escusa ni esepcion

ni la circunstancia de q.e otro haya causado el mal;

pues en este caso yo debo repararlo inmediatamente i

ecxijir despues la indegnisacion. En caso de no cumplir

con alguna de las indicadas obligaciones me sujeto á

sufrir la destitución de la colocacion q.e tengo como

neglijente i descuidado en el aseo i reputación del

Colejio á que debo mi subsistencia i educación. En fé

de lo espuesto y p.a que no haya en ningun tiempo mo-

tivo de queja firmo el presente documento por ante el Sor

Vicerrector como testigo en Bogotá á 19 de Octubre de 1836.

J. Nepom.o Nuñez                 Joaquin Salgar Guebara        Ju-

[f.245v] an M.a Pardo

 

*Era rector el Dr. José María Duque Gómez (1835-37); vicerrector, el Dr. Juan Nepomuceno Núñez Conto (1835-36) y secretario el Dr. Juan María Pardo.

Un año después, Joaquín Salgar obtuvo la beca de la Sacristía (caja 31 f.163). Salgar Vergara (así figura en las listas) asistió a las clases de Derecho canónico y de Derecho público eclesiástico, Derecho internacional, Derecho Constitucional, Medicina legal y Teología. El 18 de diciembre de 1836 fue elegido procurador del Colegio (caja 29 ff.397-98).

 

No sabemos cuándo pasó a llamarse Aula Máxima el salón de actos literarios.
Esta es la primera documentación: una foto publicada en la Revista del Rosario, en 1909.

 

 

Los restauradores.

Así como Salgar nos dice de pasadita que los cuadros estaban "limpios y remendados por un pintor todos los que estaban rotos", aprovecharemos para decir algo sobre la profesión de restaurador en el país.

No sabemos de dónde obtuvo el dato Salgar, pero por ahora le daremos todo el crédito. En todo caso, mucho tiempo después los pintores seguían restaurando, como lo comprueban los recibos que pagó el Museo Colonial a la artista Inés Acevedo Biester, en 1949, por concepto de restauración.

César Porras, restaurador profesional, afirma que la primera escuela de restauración colombiana se fundó en 1974, el Centro Nacional de Restauración, por iniciativa de Unesco. Pero esta ya es otra historia...

 

*Este documento es parte de la serie Voces del Archivo.

Uribe, C. (2019). Restauración: el arte detrás del arte. Revista Credencialedición en línea.