En días pasados se dio la celebración de los 50 años de la creación de los Consejos Estudiantiles, quienes se fundaron mediante aquel decreto rectoral número 49, el 7 de octubre de 1969, firmado por el rector Antonio Rocha Alvira, quien le concedió a los estudiantes la potestad de elegir y ser elegidos mediante una representación directa, allí nacieron los Consejos Estudiantiles.

Pero, no hay que desconocer la historia previa, la cual inicia con aquella obra de teatro de 1968 y el Comité Estudiantil de Medicina durante el mismo año, en el que se destaca el liderazgo y la entrega de su primer Presidente llamado Santiago Currea. Tanto la obra teatral titulada “Humanae Vitae” como el Comité Estudiantil, aportaron demasiado y son los pilares de la conformación de los primeros Consejos Estudiantiles de 1969.
 
Desde esa fecha, y hasta el día de hoy, los Consejos Estudiantiles se han conocido como una escuela de liderazgo, en la que muchos nos hemos desarrollado y potencializado como lideres rosaristas, buscando siempre el bien común sobre el particular y estando siempre a la disposición de los estudiantes rosaristas y de sus intereses.  
 
En el marco de los cincuenta años de representación estudiantil, cabe hacer mención a un elemento fundamental, como lo es la gratitud hacia tres grandes grupos que conforman lo que yo llamo “la trilogía de la representación estudiantil”, los cuales son la universidad, los representantes estudiantiles nuevos y antiguos, y los estudiantes.

 

En primer lugar, quiero manifestar una gran gratitud con la Universidad del Rosario en nombre de la representación estudiantil, por apoyarnos y respaldarnos a nosotros como miembros de los Consejos Estudiantiles en el desarrollo de eventos y con las exigencias que le hemos planteado en el transcurso de estos 50 años, permitiéndonos así, cumplir con el primer designio de aquel decreto rectoral de 1969, en el cual se permiten unas elecciones por los estudiantes para designar un Consejo Estudiantil que colabore con sus órganos constitucionales en el desarrollo, progreso y bienestar de nuestro Colegio Mayor.
 
En segundo lugar, gratitud con nuestros predecesores, quienes desde 1968 trabajaron arduamente para conseguir lo que somos hoy en términos de representación, siendo referentes a nivel local y nacional en gobierno estudiantil. Somos conscientes que mucho de lo obtenido hoy es por las batallas del ayer. Por eso y mucho más, se agradece ese esfuerzo, esas ideas, esa entrega y ese liderazgo. Nosotros, los Consejos Estudiantiles actuales, esperamos estar cumpliendo sus expectativas y continuar su legado de la mejor manera posible.
 
Por último, gratitud a nuestra razón de ser, gratitud a los estudiantes rosaristas, quienes año tras año, depositan su confianza en nosotros para representarlos y representar sus intereses en nuestra universidad, gracias por creer en la representación y en las ideas de las personas que se arriesgan a asumir el liderazgo en los Consejos Estudiantiles. A ustedes, les aseguramos que seguiremos estando allí para apoyarlos y acompañarlos las veces necesarias.

 

Finalmente,  después de casi un año de gestión y de haber aprendido mucho sobre estos 50 años, puedo decir que se ha logrado bastante, por ejemplo el fondo de becas “sueño ser”, las inducciones institucionales, los más de 500 millones donados a becas, entre muchos otros proyectos. Pero, también falta mucho por lograr, por mejorar y por dar a nuestra universidad y a los estudiantes.
 
Son 50 años y esto es solo el inicio, espero que los Consejos Estudiantiles entrantes estén a la altura de los retos que se les van a presentar. Por ahora, les pido a todos que sigamos soñando en grande, como lo hemos venido haciendo durante 50 años, porque la Universidad del Rosario, nuestra universidad, es muy grande como para tener sueños pequeños.

George Samudio
Presidente del Consejo Superior Estudiantil 2019.