Redacción por: Paula Escallón
De acuerdo con Claudia Marcela Rozo, experta en niños, niñas y adolescentes, manejo escolar y profesora de Terapia Ocupacional de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, el uso de pantallas en menores de edad puede generarles ansiedad e incluso depresión.
“Existen serios indicios de que los niños que acuden a muy temprana edad a pantallas, tienen unas alteraciones muy importantes en el comportamiento, como alteraciones en la tensión, la ansiedad, la depresión y el desinterés por socializar. Estudios realizados por la UNICEF lo confirman”, señala la profesora Claudia.
Las pantallas siguen siendo parte de las necesidades de los procesos educativos y por eso limitarlos del todo no será posible, por ello, la profesora Claudia recomienda seguir las siguientes pautas:
-Dar ejemplo. En la medida en que los padres usen menos las pantallas, los hijos también lo van a hacer. Comenzar por el ejemplo es un buen elemento que puede servir mucho para disminuir el consumo de pantallas que se está teniendo.
-Vigilar los contenidos que sus hijos ven en los dispositivos móviles. Es importante vigilar los contenidos y los recursos a los que los jóvenes acceden, en tiempo y calidad de interacción con las pantallas.
-Establecer horarios de acuerdo con la necesidad del uso. Crear horarios en los cuales los hijos pueden tener acceso a las pantallas y espacios en los cuales no se deben tener pantallas.
Finalmente, la profesora Claudia resalta la importancia de que los padres y familias compartan juegos y actividades que no estén asociadas a los elementos digitales.