El Calvario

Personaje:

Calvario. Representación pictórica o escultórica de Cristo crucificado, acompañado de otros personajes bíblicos. En parte por el sentido de la palabra “Gólgota” (calavera, en hebreo; calvaria, en latín), se creía que la cruz se erigió en el sitio de la tumba de Adán. Por ello, los artistas medievales pintaban una calavera y huesos cruzados, un esqueleto en un ataúd, o bien cadáveres sentados al pie de la cruz. La imagen de la crucifixión y de los personajes a ella asociados se vuelve común a partir de la época carolingia. Por influencia bizantina, se usó una figura de Cristo vivo y triunfante. A partir del siglo XI, el Cristo demacrado y coronado de espinas se impuso en Occidente. El tema se presta al tratamiento simétrico, usando parejas de figuras con la cruz como eje. Aquí vemos a la Virgen y a san Juan, a los lados, y a María Magdalena, al pie. 

Descripción:

Formato vertical. Centro: Cristo, cabeza inclinada hacia abajo y hacia su derecha; perizoma, pies superpuestos, llagas en su costado derecho y pies. Lado izquierdo: la Virgen de pie, observando en actitud dolorosa; mano izquierda en el mentón, viste túnica amarilla y manto azul. Lado derecho: San Juan, de perfil derecho, mira a Cristo. Viste túnica oscura y manto rojo. A los pies, detrás de la cruz, María Magdalena sentada, coge el madero con su mano izquierda; viste túnica y manto amarillo.