Esta clasificación considera las encuestas de opinión realizadas al equipo profesoral y estudiantes, en relación con la experiencia de aprendizaje, el entorno de trabajo, su compromiso con la sostenibilidad, la integridad y su resiliencia para crear un cambio e impacto positivo. En la construcción del ranking, los resultados de las encuestas se complementan con los datos de la ONU y del Banco Mundial sobre el rendimiento de los países para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Para Alejandro Cheyne, rector de la institución, la Universidad del Rosario, desde su fundación, ha sido fiel a sus valores y a su propósito de construir de país, “es aquí donde la posición que obtiene nuestra institución en este ranking, toma mayor importancia y es reflejo de lo que somos como Rosaristas”.
El reconocimiento a la Universidad destaca la opinión de los estudiantes, quienes fueron consultados sobre la educación que reciben basada en valores y que les permita afrontar los desafíos globales, así como la opinión de directivos y profesores, quienes valoran de manera favorable el desarrollo de su carrera profesoral, la comunicación interna, la apreciación del trabajo, la confianza en las decisiones que se toman en todos los niveles de la universidad y sus valores.
Frente a estos resultados, Wilson Herrera Romero, director de Phronimos - Centro de formación en ética y ciudadanía de la Universidad del Rosario señala que: “Los resultados del ranking son importantes en la medida en que permiten comparar lo que están haciendo las distintas universidades en relación con la ética y la sostenibilidad. En el caso del Rosario, partimos del principio de que la formación ética y el fomento de prácticas sostenible son un asunto que concierne a todos los actores de la comunidad Rosarista y que debe centrarse en la sensibilización por el otro, en una deliberación responsable y un comportamiento íntegro”.
Ser Rosarista implica una vocación de liderazgo académico, ético y humano, y es precisamente el resultado del ranking el que destaca esos valores. El sello de calidad en la formación de los estudiantes, basado en un compromiso ético, es un distintivo de la experiencia significativa en el aprendizaje, así como de nuestro compromiso con una cultura de respeto a la diversidad, impulso a la equidad y fomento de la inclusión.
Finalmente, Mónica María Correa Zabala, directora de Planeación y Efectividad Institucional señala que: “Ser la mejor universidad en Colombia en relación con la promoción de la ética y la sostenibilidad es un reconocimiento para toda la comunidad Rosarista. Estos resultados reflejan el trabajo en equipo y el compromiso con la implementación de prácticas que fomenten el desarrollo humano integral como parte de nuestro sello de calidad”.
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