Análisis de la vulnerabilidad del plan de emergencias en los colegios públicos en Bogotá
Jully Pauline Barrera Martínez, Jair Sebastian Cardozo Olmos, Diego Alejandro Fuentes Gomez
Jully Pauline Barrera Martínez, Jair Sebastian Cardozo Olmos, Diego Alejandro Fuentes Gomez
Se realiza un estudio de vulnerabilidad en un centro educativo ubicado en la localidad de Tunjuelito suroriente de Bogotá.
Zona catalogada de alto riesgo en caso de actividad sísmica; en la investigación se analiza el nivel de respuesta y eficacia, de la institución al implementar el plan de emergencia y contingencia solicitado por la legislación nacional vigente y las aseguradoras de riesgos laborales (ARL). El estudio arrojo como resultado que la institución solo cuenta con un plan de emergencia estructurado en documentos que no son divulgados a la comunidad educativa.
Estamos en una etapa donde se generan sistemas de prevención a nivel general sin tener en cuenta las características individuales de cada empresa, institución; donde se ha estructurado un plan o ruta de evacuación siguiendo las normas estándar, lo cual no beneficia o permite que todas las entidades involucradas en su aplicación lo puedan hacer de la manera indicada, o eventualmente no cuentan con los recursos materiales ni conceptuales para ello, al enfocarnos en particular en colegios públicos de zonas de alto riesgo, por su ubicación geográfica cerca de las áreas comprometidas por fallas estructurales o geológicas al momento de un sismo.
El país tomo enserio el tema de prepararse para un movimiento telúrico desde que Haití se vio afectado a tal escala, esto obligo a que varios países tomaran conciencia y se tomaran a la tarea de realizar un plan de respuesta a las emergencias y desastres; la campaña de preparación en Colombia inicio en el 2003 articulando de forma tenue a las entidades de rescate como lo es la cruz roja y la defensa civil y en especial a los ciudadanos.
La sismicidad en Colombia está relacionada con la actividad en la zona de subducción del pacífico colombiano y en las fallas geológicas. Una de las zonas con la mayor concentración de eventos sísmicos en Colombia es el “Nido sísmico de Bucaramanga”, con epicentros ubicados en la zona de la Mesa de Los Santos en el departamento de Santander.
Para evaluar la amenaza sísmica es necesario conocer donde se pueden generar los sismos. El territorio colombiano presenta diferentes niveles de amenaza sísmica (alta, intermedia y baja), determinados por la información sísmica registrada a nivel histórico e instrumental, así como por probabilidad de ocurrencia de eventos sísmicos. En general, el 83% de la población está ubicada en zonas de amenaza sísmica intermedia y alta. (IDIGER, 2018).
ANALISIS HISTORICO
Según el especialista en seguridad antisísmica y contra terremotos, el ingeniero Jorge Salazar, existe una proyección de un sismo de fricción horizontal, como el de Haití, en Colombia. El país está en el llamado cinturón de fuego, en donde también está China, Japón, Chile, California, México, Centroamérica entre otros, lo que lo hace más vulnerable, no solo porque está localizada en una región donde hay placas que se están acomodando, sino “porque los Andes son parte de las formaciones más recientes del planeta, lo que hace que nuestra geografía presente fallas geológicas”, dice Salazar. (Semana, 2010)
Nuestro país no ha estado exento de sismos a lo largo de la historia, recientemente estos movimientos telúricos se volvieron de cotidianidad para los ciudadanos colombianos en ciertas regiones del país, Colombia está situado en el cinturón de fuego lo que lo ubica en una zona activa y propensa a estos sismos, el prontuario no está libre de sismos de gran magnitud, para dar a conocer lo expuestos que se encuentra el país mencionaremos aquellos que nos afectado a lo largo de la historia colombiana: en 1875 ocurrió uno de los más fuertes, que dejó mil muertos y a Cúcuta semidestruida.
En la ciudad de Bogotá se reportaron 13 víctimas y aproximadamente cien heridos por el evento sísmico del día 9 de febrero de 1967 con magnitud 7.0 y epicentro en el municipio de Colombia (Huila). En este evento sísmico varias viviendas presentaron grietas considerables en muros y otras quedaron en ruinas.
La ciudad de Bogotá está expuesta a la actividad sísmica generada por los diversos sistemas de fallas geológicas activas existentes en el país, en mayor o menor grado en función de la distancia de la capital a éstos sistemas, tales como el sistema de Falla Frontal de la Cordillera Oriental (Falla Guaicáramo, Falla Algeciras), Falla Usme, Honda e Ibagué.
Bogotá se encuentra localizada en una zona de amenaza sísmica intermedia, dado que se encuentra ubicada aproximadamente a 40 km de distancia del sistema de Falla Frontal de la Cordillera Oriental (Falla del Piedemonte Llanero) que es la fuente sísmica activa más cercana a la ciudad y que tiene el potencial de generar sismos de magnitudes importantes. (IDIGER, 2018)
En 1979, el segundo más fuerte del siglo, destruyó la población de San José de la Costa y parcialmente a El Charco, Tumaco y otras poblaciones.
En 1983, el terremoto de Popayán dejó 300 muertos y 508 heridos El 15 de agosto de 1992 hubo un temblor de 5,4 puntos en la escala de Richter, en el centro y suroccidente del país. El epicentro estuvo ubicado cerca de Tuluá. La catedral de Manizales se estremeció.
La madrugada del 18 del octubre 1992 un terremoto de 6,6 puntos en la escala de Richter sacudió la población de Murindó, a 310 km. de Medellín, en Antioquia, dejando como saldo 104 familias sin vivienda.
El 19 del mismo mes hubo un segundo terremoto de 7,2 grados y en San Pedro de Urabá explotó un volcán de lodo. El saldo final fue de cuatro desaparecidos, 57 heridos y una niña muerta.
Ese fin de semana se suspendieron todas las actividades de asistencia masiva, incluida la fecha futbolera.
El 6 de junio de 1994 un terremoto causó la avalancha del río Paez en el departamento del Cauca y dejó 800 muertos y 55 mil indígenas damnificados.
El 28 de enero de 1995 un temblor con epicentro en Tauramena, Casanare, sacudió a todo el país.
Y en menos de dos semanas, el 8 de febrero, un segundo terremoto azotó a Pereira dejando 30 muertos y 300 heridos. 1335 edificaciones resultaron afectadas El 19 de febrero de 1997, un temblor de 5,7 en la escala de Richter tuvo su epicentro en los límites entre Valle y Chocó, sin dejar mayores daños. (El Tiempo, 1999)
El último acto del drama sísmico del Siglo XX en Colombia, ocurrió en el eje cafetero 1999, región azotada ya por un terremoto veinte años atrás.
El 25 de enero a las nueve de la mañana un terremoto de algo más de seis grados dejó mil y pico de muertos en la región denominada Eje cafetero, diez mil heridos y doscientos cincuenta mil damnificados. El movimiento telúrico destruyó el centro de la ciudad de Armenia, y los barrios del sur de esa capital. Causó serios destrozos en Pereira, y otros municipios de Risaralda, y en Caldas y el Norte del valle. En el Quindío quedaron seriamente averiados los municipios de Circasia, Córdoba, Barcelona, Montenegro y La Tebaida (Red Cultural del Banco de la República en Colombia).
ANALISIS DE DAÑOS EN LA HISORIA SISMICA DE COLOMBIA
Según un artículo publicado por blu radio donde realizaron un estudio de las zonas con mayor riesgo a terremotos son:
"La directora técnica de geo amenazas del Servicio Geológico Colombiano, Marta Lucía Calvache Velasco, una de las más reconocidas expertas en sismología, analizó en los micrófonos de El Radar de Blu Radio los recientes movimientos telúricos en Ecuador y explicó cuáles son las zonas más vulnerables a un sismo de grandes magnitudes en Colombia.
Según Calvache, las zonas cercanas al Océano Pacífico son las más vulnerables.
"En Colombia la zona de mayor amenaza sísmica, es decir la posibilidad de que ocurran sismos más grandes, están al frente de las costas del Océano Pacífico, especialmente hacia el sur; Nariño, Cauca, Valle del Cauca y Chocó al frente de sus costas tienen una amenaza sísmica muy importante con sismos de magnitudes tan grandes como 8,8”, explicó.
Añadió que también en las cordilleras hay zonas sísmicamente muy activas, asociadas a la prolongación de esas cordilleras.
“Eso es en la zona Andina, zona del Pacífico y zona Norte”, complementó.
¿Por qué el terremoto de Haití de menor magnitud causó menos estragos que el de Ecuador?
Según la directora técnica de geoamenazas del Servicio Geológico, las principales razones se fundamentan en la infraestructura de cada país. (Vea también: Descartan alerta de tsunami en Colombia tras sismo en costas de Ecuador).
“Colombia ha ido mejorando, para prevenir grandes desastres de origen sísmico lo principal es que las edificaciones no colapsen, porque ahí es donde está la mayor parte de los muertos. Por ejemplo, si comparamos lo que pasó con el sismo de Haití que fue de magnitud 7,2 con el de Ecuador que fue de 7,8, se habla de unos 300.000 muertos y todo el país quedó destruido. La gran tragedia es porque la infraestructura no estaba en absoluto preparada para soportar los movimientos”, finalizó Calvache.
“Debemos entender que el país, o sea donde nosotros estamos viviendo, es producto de la interacción de procesos geológicos que han venido ocurriendo durante millones de años y nosotros estamos aquí y que el entorno nuestro es como es porque es producto de eso. En Colombia hay unas placas y una se está moviendo, que es la del Pacífico, se está moviendo hacia el oriente, Suramérica se está moviendo hacia el occidente y estas dos placas se vienen encontrando desde hace algunos millones de años y producto de ese encuentro se ha venido arrugando y forma la Cordillera de Los Andes”.
La amenaza es el evento que pueda ocurrir, en este caso, hablando de amenaza sísmica es dónde puedan ocurrir esos sismos y de qué magnitudes pueden ser. Para eso hay que estudiar desde un punto de vista geológico cuáles son las estructuras que hay tanto en zonas marinas como en zonas del continente. (Delgado)
Ahora analizaremos un artículo publicado por la revista el tiempo sobre la cuan vulnerable es Colombia ante un sismo:
La energía liberada en el sismo ocurrido el pasado 16 de abril en Ecuador equivale a cerca de 1.000 bombas atómicas similares a las arrojadas a Hiroshima. Es por esto que los sismos de magnitudes importantes y poco profundos, como los ocurridos en el vecino país, son devastadores.
Colombia se encuentra ubicada en una de las zonas sísmicas más activas de la tierra, conocida como el anillo circumpacífico, el cual corresponde al borde del Océano Pacífico, que es precisamente donde han ocurrido los últimos grandes sismos en países como Chile, Japón y ahora Ecuador.
De acuerdo con estudios de amenaza sísmica realizados a nivel nacional por la Asociación Colombiana de Ingeniería Sísmica –AIS–, cerca del 40% de los Colombianos se encuentra en zonas de amenaza sísmica alta y 47% de la población del país esta ubicada en zonas de amenaza sísmica intermedia, es decir, el 87% de la población Colombiana se encuentra bajo un nivel de riesgo sísmico considerable.
El problema se presenta no solo por el nivel de amenaza sísmica sino también por del grado de vulnerabilidad que pueden presentar no solo las edificaciones, sino también la infraestructura como puentes, carreteras, presas, redes eléctricas y de gas, entre otras.
En nuestro país, y como respuesta a la tragedia del sismo de Popayán en 1983, la AIS redactó el primer Código Colombiano de Construcciones Sismo Resistentes, el cual es de obligatorio cumplimiento en todo el territorio nacional desde 1984 (Decreto 1400 de 1984). El fin principal de estos códigos es el de salvaguardar la vida de las personas que ocupen las edificaciones ante la ocurrencia de un sismo fuerte.
Gracias a la Ley 400 de 1997 se han adelantado dos actualizaciones de los códigos de construcciones de sismo resistencia o Reglamento Colombiano de Construcción Sismo Resistente para edificaciones: la primera fue en el año 1998 (NSR-98) y la última en el año 2010 (NSR-10). (CORREAL, 2016)
Además de contemplar los requisitos mínimos de construcción sismo resistente para edificaciones nuevas, estos reglamentos incluyen recomendaciones para el reforzamiento estructural de edificaciones construidas antes de la vigencia del reglamento sismo resistente.
En cuanto a puentes la AIS ha desarrollado, por encargo del INVIAS, dos versiones del Código Colombiano de Diseño Sísmico de Puentes (CCP) en los años 1995 y 2014. Aunque la última versión del CCP está basada principalmente en la normativa de los Estados Unidos, se desarrolló un estudio actualizado de la amenaza sísmica del territorio nacional aplicada a puentes.
Lo expuesto anteriormente le brinda a Colombia herramientas para enfrentar la ocurrencia de sismos fuertes al menos desde el punto de vista normativo, pues las edificaciones y puentes diseñados y construidos bajo la normativa sismo resistente presentarán una muy baja probabilidad de falla.
Si bien lo anterior es tranquilizante no es suficiente. Es necesario que los gobiernos locales tengan un conocimiento claro del nivel del riesgo sísmico que pueda tener la infraestructura localizada en sus territorios, y esto solo se logra a través de estudios especializados de las diferentes infraestructuras de tipo vital, la cuales deberán estar funcionando en el momento de un sismo fuerte. Dichos estudios deben ser realizados primordialmente en ciudades con mayor concentración de población.
Estos estudios de riesgo sísmico no solo ayudará a que los gobiernos locales conozcan el problema que pueden enfrentar a la hora de un sismo fuerte, sino también a definir acciones de mitigación de dicho riesgo en nuestras ciudades.
Como siempre, son nuestros gobernantes los que tienen la última palabra, en un tema que tiende a ser olvidado, pero que los grandes sismos que pasan en nuestros alrededores nos hacen recordar que no podemos desconocer la realidad sísmica del país, que ya nos ha dejado varias lecciones tristes en el pasado, en donde millones de Colombianos han perdido sus vidas como también su patrimonio.
JUAN FRANCISCO CORREAL
Director del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental de la Universidad de los Andes. Presidente de la Asociación Colombiana de Ingeniería Sísmica. (CORREAL, 2016)
HISTORIAL SÍSMICO DE BOGOTA
La registraduria nacional de Colombia público un artículo sobre el riesgo de sísmico en Bogotá en el cual no hablan sobre:
La probabilidad de que un terremoto afecte a Bogotá es Alta, no solamente por el movimiento telúrico en sí mismo, sino por la vulnerabilidad de la ciudad. Bogotá, ha sufrido tres sismos de gran magnitud por tres fallas principales que pueden ser serias amenazas: la falla frontal de la Cordillera Oriental, la falla del Magdalena y la falla La Cajita, ubicada al sur de la ciudad. Aunque esta última no está activa, su cercanía a Bogotá la hace un peligro potencial.
Según el estudio “Microzonificación Sísmica de Bogotá”, realizado por la Universidad de los Andes y publicado por Ingeominas, la Dirección de Prevención y Atención de Emergencias de Bogotá, Dpae, y la Dirección Nacional para la Prevención y Atención de Desastres en 1997, en caso de ocurrir un sismo cercano de magnitud moderada generado en los Cerros Orientales, la capital del país seria gravemente afectada.
Según el estudio "Las zonas más afectadas serían posiblemente sectores de Los Mártires y La Candelaria en el centro, y Chapinero y Usaquén en el norte. Habría consecuencias también de consideración en algunos sectores de Barrios Unidos y Suba. Causaría graves daños estructurales y no estructurales de diferentes alturas: si el sismo ocurre durante el día, habría aproximadamente 1.600 muertos y 9.000 heridos, y si ocurre en la noche, habría cerca de 1.400. Muertos y 7.700 heridos”. (Delgado)
Bogotá, se encuentra en una zona de amenaza de sismo intermedia, y de acuerdo con las distancias de las fuentes, existe la probabilidad de que un sismo en la ciudad esté entre los 6 y 7 grados en la escala de Richter. Bogotá se localiza en el llamado “cinturón de fuego”, lo que la hace más vulnerable, no solo porque se ubica en una región donde hay placas que se están acomodando, sino “porque los Andes son parte de las formaciones más recientes del planeta, lo que hace que nuestra geografía presente fallas geológicas”.
Sismos históricos que han afectado a Bogotá El sismo del 18 de octubre de 1743, causo daños considerables a los templos de San Agustín, San Francisco, Egipto, El Carmen, Las Cruces y Santa Clara, en el que muchas casas quedaron en ruinas.
El 17 de junio de 1826 la ciudad sufrió uno de los más fuertes terremotos en el que varios edificios se arruinaron, hubo múltiples heridos y unos pocos fallecidos. El 22 de junio de ese mismo año se repitió, siguió temblando, hasta que el 16 de noviembre de 1827 ocurrió un fuerte sismo que acabó de destruir muchos conventos y casas.
Otro movimiento fuerte fue el ocurrido el 29 de agosto de 1917, localizado en la Cordillera Oriental, cerca al Páramo de Sumapaz y a unos 60 Kilómetros de Bogotá. La magnitud del sismo fue de 6.9 grados en la escala de Richter que generó movimientos telúricos durante 10 días seguidos. A las 6:30 de la mañana del viernes 31 de agosto de 1917, se dio el más violento terremoto de la serie y sacudió la capital del país durante 15 segundos. En el día repitió cuatro veces y hubo daños en casi todos los edificios de la ciudad: la Iglesia de la Catedral, la Iglesia de Chapinero que perdió su torre principal, el Claustro de Nuestra Señora del Rosario, 400 casas derrumbadas, 50 semidestruidas, Daños severos en el Palacio Lievano y por último pero no menos importante 16 muertos y múltiples heridos.
El último movimiento sísmico calificado como terremoto, fue el día 9 de febrero de 1967, a las 10:24 a.m. con escala de 7.2 grados. El saldo fue de 13 muertos, numerosos lesionados (más de 100 heridos pasaron por el servicio de urgencias de los hospitales), cuantiosos daños materiales en el que más de 50 predios perdieron sus paredes y grandes edificios sufrieron averías que todavía hoy existen.
De lo más recientes movimientos telúricos sucedidos y que aún perduran en la memoria de los residentes en Bogotá, fue el del sábado 24 de mayo de 2008 que tuvo magnitud de 5.5° y cuyo epicentro fue el calvario Meta, a 55 kilómetros de Bogotá. A las 2:21 p.m. este movimiento se sintió con diferente intensidad en otros lugares del país, causo muertes y una importante destrucción cerca de la zona epicentral. (Delgado)
PLANTEAMIENTO DEL PROBREBLA
Los colegios públicos en zonas de alto riegos tienen establecido el plan de emergencias y contingencias con los lineamientos y orientación en materia de prevención, con el que ofrece una respuesta oportuna ante una situación de emergencia; se evidencia la existencia de vacíos del conocimiento de dicho plan, no se tiene claro los procedimientos operativos normatizados por lo cual se puede establecer que es una población vulnerable. La pregunta que surge en esta temática es la siguiente ¿Está los colegios públicos en zonas de alto riesgo en la capacidad de seguir el plan de emergencias en caso de un sismo?
OBJETIVOS
El objetivo final de este artículo al realizar esta investigación es:
Analizar la vulnerabilidad del plan de acción actual del colegio Rufino José Cuervo en caso de presentarse eventos como emergencias y desastres.
Enfoques de la investigación:
Diseño de investigación
Investigación descriptiva
Calcular la vulnerabilidad del colegio Rufino José Cuervo en la actualidad mediante la aplicación de encuestas e interpretación de su capacidad de respuestas ante un evento de emergencia y desastre.
Unidad de análisis:
Se estudiarán el personal administrativo, profesores y el plantel estudiantil del colegio Rufino José Cuervo ubicado en la localidad de Teusaquillo de la ciudad de Bogotá.
Población y la muestra:
Método general o científico.
Se realizara la identificación de riesgos y peligros utilizando una matriz de identificación de peligros (basada en la GTC45), con la cual se realizara la valoración de dichos peligros, teniendo en cuenta las medidas de control con las que se cuentan, priorizar dichos peligros y de esta manera establecer un plan de trabajo para disminuir la vulnerabilidad de los colegios públicos situados en zonas de alto riesgo ante un evento natural que pueda desencadenar una emergencia.
Técnicas de recolección de información:
La información se recolectara con ayuda de una lista de chequeo sobre los elementos básicos que debe contar una institución educativa para la atención de emergencias y desastres.
Adicional se realizara encuestas de conocimiento sobre el tema de atención de emergencias y desastres.
Enfoque cuantitativo:
Se tomará como herramienta la aplicación de encuestas a los diferentes estudiantes, profesores y personal administrativo del colegio Rufino José Cuervo, con las cuales se determinara la vulnerabilidad (escala numérica)
IMPLEMENTACIÓN DE ESTUDIO DEL CASO
Se analizó el conocimiento de los estudiantes, docentes y administrativos de un plantel educativo de Bogotá, los resultados fueron esperados acorde a la situación general, más del 60% de los encuestados no saben qué hacer en caso de emergencia, un 38% sabe que hay una ruta de evacuación y no saben prestar primeros auxilios, el restante dice saber qué hacer en caso de dicha emergencia, ese 2% está compuesto solo por docentes y administrativos, es aquí donde surge nuestra pregunta ¿los estudiantes saben qué hacer en caso de una actividad sísmica?.
Estamos sujetos a una cultura de obligación donde, si no es por cumplir un requisito para certificación o estar en el marco legal, realizamos dicha socialización o elaboración del plan de emergencias y contingencias distrital, de no ser así al no estar sujetos a presión burocrática o por tener todos los requisitos de funcionamiento no se realiza la tarea lo que al final denota en desconocimiento por las personas que realmente necesitan dicha capacitación del plan de emergencias y contingencias. Los más afectados son los colegios públicos distritales que manejan el diseño predeterminado por la alcaldía, dichos colegios carecen de una estructura de divulgación, simulación y respuesta en caso de una posible emergencia los cuales solo una cantidad de profesores posee el conocimiento necesario para realizar una evacuación eficiente, la principal función del plan de emergencias y contingencias es salvaguardar la mayor cantidad de vidas posibles con la secuencia de actividades en el antes, mediante y después de dicha situación esto debe ser de conocimiento general donde un niño de 5 años ya pueda reaccionar de forma calmada o por cultura saber que hacer o cómo reaccionar en esta clase de situación.
ANÁLISIS DE RESULTADOS
Como mencionamos en el inicio de este artículo, la falla esencial es que el plan no se diseña acorde al plantel o institución si no es una directriz generalizada donde su focalización va a tener una ruta de evacuación señalizada, puntos de encuentro, elementos básicos para primeros auxilios, conformación de una brigada de emergencia (como está compuesta, roles en esta); estas pautas en gran parte de los colegios distritales en áreas de altos riesgos solo se encuentran en el papel, no cuenta con el cronograma de capacitación para los estudiantes, no cuentan con la brigada e incluso sin botiquín para dar los primeros auxilios; esto se debe a la falta de supervisión de los entes de regulación.
CONCLUSIÓN
Una solución para mejorar la cultura o mejor la respuesta en caso de un sismo es generar una brigada de respuesta constituida no solo por docentes, donde los alumnos de estas instituciones sean entes activos capacitados para dar respuesta y ayuden a cumplir estas labores de rescatistas o de guías en la emergencia para estudiantes de edades menores; la razón de esta propuesta es que el hacinamiento en estos colegios provoca que los docentes no tengan un control o una capacidad de cubrimiento en su respuesta al plan emergencia y desastres.
Al poseer una brigada entrenada y estructurada generaremos nodos de respuesta donde un grupo de estudiantes de cursos mayores posean un grupo de alumnos de un curso menor a su cargo los cuales se focalizarán en su evacuación y llegado el caso de prestar los primeros auxilios siendo así una forma más efectiva de minimizar el riesgo de pérdidas de vidas en un caso de emergencia y desastre.
Trabajos citados
CORREAL, J. F. (23 de Abril de 2016). ¿Cuán vulnerable es Colombia ante un sismo? Recuperado el 18 de Octubre de 2018, de https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16571309
Delgado, M. A. (s.f.). Recuperado el 27 de Octubre de 2018, de https://www.registraduria.gov.co/Cual-es-el-riesgo-sismico-en.html
EL RADAR - Blu radio. (23 de Abril de 2016). Las zonas de Colombia con mayor riesgo de un terremoto de grandes magnitudes. Recuperado el 21 de Septiembre de 2018, de https://www.bluradio.com/129913/las-zonas-de-colombia-con-mayor-riesgo-…
El Tiempo. (25 de Enero de 1999). TERREMOTOS EN LA HISTORIA. Recuperado el 8 de Octubre de 2018, de https://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-892704
IDIGER. (25 de Septiembre de 2018). IDIGER. Recuperado el 7 de Octubre de 2018, de Caracterización General del Escenario de : http://www.idiger.gov.co/rsismico
Red Cultural del Banco de la República en Colombia. (s.f.). Temblores y terremotos. Recuperado el 19 de Septiembre de 2018, de http://www.banrepcultural.org/biblioteca-virtual/credencial-historia/nu…
Semana. (15 de Enero de 2010). Recuperado el 6 de Octubre de 2018, de ¿Cuál es el riesgo sísmico en Bogotá?: https://www.semana.com/nacion/problemas-sociales/articulo/cual-riesgo-s…
Servicio Geológico Colombiano. (19 de Agosto de 2018). Boletín Preliminar de réplicas del Sismo del 18 de agosto de 2018 en el Mar Caribe. Recuperado el 18 de Octubre de 2018, de https://www.sgc.gov.co/sismos/sismos/ultimos-sismos.html: https://www2.sgc.gov.co/Publicaciones/Sismos%20importantes/Replicas%20S…
Servicio Geologico Colombiano. (s.f.). Sismicidad Histórica de Colombia. Recuperado el 8 de Enero de 2018, de http://sish.sgc.gov.co/visor/