Redacción por: Paula Escallón
Según la Organización Mundial de la Salud, la epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública que ha tenido que afrontar el mundo. Causa más de 8 millones de muertes al año, de las cuales aproximadamente 1,2 millones se deben a la exposición al humo ajeno. El consumo de tabaco no solo tiene un gran Impacto individual, sino también a nivel social y económico, ya que, entre el 6% y el 14% de los gastos mundiales en salud están dirigidos a enfermedades relacionadas con el cigarrillo, el cual es un gran rubro de dinero que podría utilizarse en otros aspectos.
El profesor Jeffrey González señala que, “el cigarrillo es la sustancia psicoactiva más consumida del mundo, el tabaco es bien reconocido como un agente cancerígeno, contiene aproximadamente 70 compuestos responsables de generar diferentes tipos de cáncer, como el cáncer de pulmón, 9 de cada 10 cánceres de pulmón son a causa del cigarrillo, pero también puede generar enfermedades como el cáncer de vejiga y el cáncer orolingual, también es responsable de otras grandes patologías como enfermedades pulmonares, accidentes cerebrovasculares e infarto agudo de miocardio”.
La OMS también recalca que, el humo no solo es mortífero para los fumadores, sino también para los no fumadores que están expuestos al humo ajeno. Incluso con los cigarrillos electrónicos, que pueden contener nicotina y otros compuestos tóxicos que son dañinos para la salud, está claro que estos productos son inseguros y deben ser evitados para proteger la salud.
“Se ha incrementado el consumo de vapeadores y cigarrillos electrónicos, los cuáles también utilizan nicotina y también tienen una afectación en el tejido propio del pulmón, que, a largo plazo pueden originar afectaciones graves en la salud. Si bien tienen solamente 6 o 7 años de difusión, una gran parte de personas alrededor del mundo lo consumen y lo usan habitualmente, por lo que se considera como una de las sustancias psicoactivas de más alta adicción, que puede generar consecuencias a futuro en la salud y en la economía. Además, es una entrada al uso de otras sustancias psicoactivas en la población adolescente”, concluye el profesor Jeffrey González.
Por su parte, el profesor Paul Rodríguez adiciona que, “la evidencia científica sobre los impactos nocivos de los cigarrillos electrónicos y vapeadores sobre la salud va creciendo año a año, paradójicamente, esto es una mala noticia en sí porque nos deja ver que el daño sobre la población es creciente e irreparable. Si bien las prevalencias de estos productos son bajas en el país, su uso en adolescentes y adultos jóvenes (11,9% entre 18 a 24 años) está creciendo rápidamente, amparado en estrategias de mercadeo dirigidas a este segmento de la población. Nada hay de cierto que se hayan introducido como una alternativa de menor riesgo a los fumadores de convencionales”.
¡Inhala y exhala libre de humo de cigarrillo y vapeadores!
